Revisión sistemática de la eficacia del tratamiento combinado de fisioterapia junto con toxina botulínica tipo A en la espasticidad de miembros inferiores en niños con parálisis cerebral

Introducción

La parálisis cerebral es una lesión no progresiva del sistema nervioso central que origina, entre otros posibles síntomas, un tono muscular patológico. La espasticidad es muy frecuente y conlleva limitaciones en las actividades de la vida diaria. Aunque existen multitud de tratamientos físicos y farmacológicos para este alterado tono muscular, su eficacia está muy discutida, ya que los resultados son muy dispares de un individuo a otro.

Objetivo

El objetivo del trabajo es realizar una revisión sistemática de la eficacia del tratamiento de la espasticidad de miembros inferiores, en cualquier tipo de parálisis cerebral infantil, mediante tratamiento fisioterápico junto con tratamiento farmacológico con toxina botulínica tipo A. Dicha eficacia se refiere a conseguir un aumento en el rango articular, una disminución en el tono muscular o una mejoría en la marcha, que se reflejarán en escalas de valoración específicas y en escalas de valoración de las actividades de la vida diaria. Los objetivos secundarios del trabajo son conocer los efectos adversos de la inyección de la toxina y la variabilidad de la duración de los efectos de esta.

Material y método

Se realizó una búsqueda bibliográfica de artículos desde enero de 2006 hasta enero de 2013, ambos incluidos, en las siguientes bases de datos: Biblioteca Cochrane, Medline, CINAHL, ISI Web of Knowledge y PEDro. Se valoró la calidad de los estudios prospectivos y retrospectivos y de los ensayos clínicos con la Escala de Jadad (también llamada Sistema de Puntuación de Calidad de Oxford), y la de las revisiones sistemáticas con la Assessment of Multiple Systematic Reviews (herramienta de valoración de revisiones sistemáticas).

Resultados

Se encontraron 14 artículos que cumplían los criterios de inclusión. Se observó, en 9 de ellos, una disminución en el tono muscular, un aumento del rango articular y una mejora en la función motora gruesa. Dichos resultados variaron de unos pacientes a otros debido, entre otras causas, a la edad (mejores resultados en pacientes menores de 6 años), la musculatura inyectada (mejores resultados en el tríceps sural), el uso de ecografía como guía para una mayor precisión de la inyección o el estado cognitivo del paciente.

Discusión

Se observaron resultados estadísticamente significativos en la reducción del tono muscular a corto plazo en 12 de los estudios, detectándose el momento de mayor disminución aproximadamente a las 4-5 semanas postinyección. Sin embargo, a largo plazo (un año) solo en un estudio se mantenía esta disminución del tono muscular. El uso de multitud de escalas obstaculizó la posibilidad de comparar los resultados de la medición del tono muscular o la valoración de la función motora gruesa entre diferentes estudios. Por otro lado, algunos artículos dejan en un segundo plano las técnicas de rehabilitación utilizadas, su frecuencia y sus efectos, lo que ha dificultado saber en qué medida condicionaron la eficacia de la toxina. El tratamiento ortopédico se incluyó en 8 estudios y sus resultados coinciden en una ganancia mayor en la dorsiflexión de tobillo y en la función motora gruesa. La edad para comenzar el tratamiento con la toxina para que esta sea más eficaz está muy discutida: hay 5 estudios en los que se afirma que los menores de 6 años obtuvieron mejores resultados en la disminución del tono muscular, mientras que en otro estudio se asegura que la edad no es un factor concluyente. Para estudios futuros es importante incorporar el uso del ecógrafo durante la inyección, explicar las técnicas de rehabilitación aplicadas y su frecuencia, mejorar la calidad de los estudios con muestras de mayor tamaño y más homogéneas y utilizar las escalas más actualizadas y aceptadas.

Conclusiones

El tratamiento combinado de fisioterapia y toxina botulínica tipo A disminuye el tono muscular, aumenta el rango articular de movimiento y mejora la función motora gruesa, lo que incluye mejoras en las transferencias y en la marcha, especialmente si se añade tratamiento ortopédico. Los pacientes presentaron tras la inyección un pico de mejora respecto al tono muscular aproximadamente al mes; sin embargo, dicho pico no se mantenía a largo plazo (un año), surgiendo de nuevo el tono patológico.

A. Gallego Antúnez a, , M.J. Rodríguez Bonache b

a Clínica de Traumatología Fisiomundo, Madrid, España
b Rehabilitación, Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad Rey Juan Carlos, Madrid, España